viernes, 28 de septiembre de 2007

Karma Blue

El miércoles 26 de septiembre sali a cenar con mis amigos Caro y Juan. El destino escogido Karma Blue, resto que se ubica en la zona de Nueva Córdoba, en al calle Estrada
Había leído sobre este lugar en una nota de la sección gastronomía del portal
www.cordoba.net, donde la reseña era bastante favorable. Más allá de este punto lo que me sedujo de lugar fue la estética exterior, la cual me atrajo una par de días antes caminado por Estrada.
Mis amigos confiando en mi criterio aceptaron que fuéramos a conocer este lugar.
Antes de entrar se puede apreciar un gran concepto estético aplicado al restaurant. Una importante ventada de vidrio fijo al lado de una impactante puerta de metal, pesada y de dos hojas. Una mezcla de concepto industrial con toques de refinamiento.
El interior de dos plantas, habilitada solo al inferior, por lo menos esta noche que fui, armada con mesas negras y paredes blancas, un combinación que no falla a la hora de darle un toque de elegancia y vanguardismo a los locales gastronómicos. Las paredes como ya dije blancas decoradas con fotografías, algunas muy buenas, trabajadas en recortes y planos detalle de la figura humana. Los marcos de la fotografía estaban pintados en color metalizado, reforzando esta idea industrial de la puerta de ingreso.

La carta, acorde a los criterio estético del lugar confeccionada con una tapa de metal con el nombre lugar calado en la misma.
Las hojas, en papel de buen espesor de color metalizado. Como habrán notado, mucho diseño, mucha estética. Pero vamos ahora a untar de detalles un poco negativos.

Como parte de la decoración se aprecian varias pantallas de plasma mas una principal de formato 16/9 (cine). Lo cual puede entenderse como un toque de vanguardismo, de estética hi tech, lo que no puedo entender es en todas esas pantallas se emita un partido de la copa sudamericana, mas precisamente boca vs. san pablo. Me encanta el fútbol, soy de los que miran partidos de todas las ligas de Europa, son hincha de boca, pero si decido ir a cenar a un lugar donde invierten tanto en el diseño y la estética, que se esmeran en detalles que pretenden glamour, no quiero que se este pasando un partido de fútbol con lo que eso implica, una gran mesa con numerosas personas pendiente del partido, comentando y vociferando cada jugada. Gente de karma blue, ¿quieren una bar futbolero? No deberían haber invertido tanto de decoración no es necesario. ¿quieren un resto de vanguardia? Sacan los televisores y pongan un buen dj, o al menos no trasmitan partidos de fútbol, en los horarios de cena. Otro detalle, revisen los errores de ortografía de la carta que son varios.
Bueno voy a tratar de relajarme y comentar lo específico de la cena. Mi elección, Suprema de pollo rellena con mousseline de hongos, con salsa de pimientas, guarnecido con arroz cremoso y mix de brotes. ($20.00) No se si estaba muy entretenido con mis amigos pero tengo la sensación que la comida llegó realmente rápido. Los paltos muy bien presentados, no podía esperarse menos.
La pechuga entera, con la patita del ala, y sin nada de piel, lo cual me sorprendió agradablemente. Estaba cocida a punto con una textura casi perfecta. El relleno de hongos generoso, suave y sabroso, la sala de pimientas acompañaba perfectamente, nada invasiva, otro logro del plato. EL arroz bien cremoso, de sabor sutil y agradable. La ensalada de brotes nunca llegó, pues lo que había en el plato eran hojas de rúcula, apio y lechuga. No estaba nada mal pero espera algunos brotes. El sabor y texturas del plato se integraban notablemente en uno general que puede resumirse como muy sabroso y ala vez delicado.
Mis amigos pidieron sorrentinos de salmón con salsa de liliáceas (puerro, verdeos etc)
y cintas verdes salteadas con verduras.
No los probé pero a ninguno de los les `pareció nada fuera de lo común.
Resumiendo, el lugar es muy bonito, puedo decir que algunos platos son muy interesantes, y hasta recomendables, pero si están planeando ir a cenar karma blue, antes compren el Olé y chequeen que no haya partidos de copa esa semana. Si no hay, pueden ir tranquilos de lo contrario canilleras o llevan gorro, bandera y bincha.

Cebiche

El sábado 22 de septiembre fui con mi novia Laura a cenar a cebiche, restaurant peruano que se sitúa en la creciente zona gastronómica del barrio de Alta Córdoba.
Había tomado conocimiento del lugar en mis habituales visitas al sito en línea de bares de Alta Córdoba (
www.baresdealtacordoba.com.ar).
Típico resto de la zona, casa antigua, entrada vistosa muy bien decoradas por banderas auto referenciales y que se encuentran iluminadas especialmente, puedo decir que este conjunto de electos decorativos logran un muy buen efecto, decididamente invitan a entrar, y como siempre digo, cuando se va sumando buena predisposición, se disfruta mucho más la comida.
(imagen tomada de la home page del restaurant ww.cebiche.com.ar)

Llegamos alrededor de las 22:45, y el lugar estaba casi completo. Nos recibió una de las mozas, muy simpática y muy calida.
El lugar esta muy bien ambientado, es amplio, cómodo y bien iluminado, por bien me refiero a que la cantidad de luz es adecuada, no excesiva.
(imagenes tomada de la home page del restaurant ww.cebiche.com.ar)


Bien, pasamos a lo más importante. Mi novia nunca había estado en un restaurant peruano, razón por la cual la entrada era inevitablemente cebiche y papas a la huancaína. Pedimos ½ porción de cebiche mixto (lomito de atún y calamar) ($8,50) y las papas ($6,00). El cebiche estaba en su punto justo de acidez y picor, sabroso y sutil, fresco y generoso. Y las papas a la huancaina son las mejores que he probado en Córdoba. Me fascinó la textura suave y cremosa de la salsa.
Los platos que siguieron fueron arroz chaufa con mariscos ($26.5) y pescado con salsa de verduras salteadas ($14.00)
El arroz chaufa, que fue el plato que pedí, estaba impecable. Arroz bien graneado, de color amarillo intenso, y con una generosa cantidad de mariscos, entre los que había camarones, mejillones y tentáculos de calamar, más trozos de lomito de atún. El arroz y los mariscos salteados con verduras y juliana de omelette.
El sabor era delicioso, la porción abundante y la presentación prolija. Como dije antes, impecable.
El otro plato, pescado con salsa de verduras salteadas, lomito de atún a la plancha (en la carta todos los platos traen el pescado a la romana, lo solicitamos a la plancha) con una salsa de verduras en juliana salteadas con agregado de caldo y una porción de arroz blanco. El pescado estaba a punto, dorado y jugoso, la salsa suave y sabrosa acompañaba sin tapar el sabor del pescado (como creo que deben ser las salsas para pescados). Este plato también en porción generosa con buena presentación.
Puedo comentar que la carta tiene una buena variedad de platos que pasan por carnes pollo y pescados, como así también las entradas, Un detalle importante es que el restaurant tiene platos fuera de la gastronomía peruana, para aquellas personas que no se animan con las cocinas regionales de otras latitudes.
Totalmente recomendable y como ya comente la amplitud de la carta invita a volver para seguir degustando los sabores del paraíso gastronómico de Latinoamérica.
Precios de referencia
½ porción de cebiche mixto $8,50
Papas huancaina $6,00
Arroz chaufa con mariscos $26.5
Pescado con salsa de verduras salteadas $14.00
Agua con gas $3.00